La palabra fintech deriva de la unión de dos palabras: finanzas (finance) y tecnología (technology). Cuando se empezó a hablar de empresas fintech en España, se trataba de compañías de reciente creación, generalmente startups. Las primeras empresas de fintech en España lograron preparar el terreno para las que vinieron después, dado que nuestro país tiene un potencial que otros países de nuestro entorno ya han alcanzado. Es por ello que las expectativas de crecimiento son enormes. Hoy en día, muchas de estas pioneras cuentan ya con un recorrido que las ha permitido consolidarse, al tiempo que el ecosistema fintech se sigue nutriendo de nuevos lanzamientos.

Estamos ante compañías en las que la aplicación de la tecnología logra que cada vez más procesos financieros cotidianos que antes consumían tiempo, recursos y mucho papeleo, resulten ahora más fáciles gracias a herramientas como las apps o Internet, haciendo que la gestión de las cuentas personales, de ahorro e inversión sea mucho más accesible y menos engorrosa. Las amplias posibilidades que brinda la web al usuario han hecho que operaciones que solo eran posibles a través del canal presencial se hayan trasladado con éxito al entorno online.

Igualmente, la proliferación de negocios basados en esta productiva unión es un hecho en España, donde la penetración de los dispositivos móviles ha favorecido su desarrollo. Precisamente, el uso de smartphones y tablets ha sido decisivo para el éxito de estas propuestas. El catálogo de empresas de fintech es muy amplio. En lo que respecta al crowdfunding, actualmente esta filosofía es el eje central de plataformas que permiten escoger el destino de nuestros ahorros entre un sinfín de proyectos, ya sean estos de carácter solidario o unidos a una contraprestación en especie, en forma de acciones o de intereses.

La industria fintech en España creció un 15% a pesar de la pandemia, acercándose a las 500 compañías y alcanzando un volumen de inversión de 300 millones de euros. España es ya el cuarto país europeo en inversión fintech

La innovación dentro del sector financiero por medio de la digitalización no ha supuesto una brecha insalvable entre la banca tradicional y online, dado que ambas siguen conectadas. De hecho, tres de cada cuatro fintech colaboran activamente entre sí. Actualmente, existen cerca de 500 compañías fintech en España según apunta el mapa sectorizado de Finnovating, plataforma de referencia mundial en fintech. A pesar de que el contexto económico no era el más favorable debido a la crisis sanitaria mundial, en 2020 este tipo de compañías crecieron un 15%. Por otro lado, España se posicionó como el cuarto país en Europa en inversión fintech, solo por detrás de Alemania, Suecia y Francia.

En lo que respecta al volumen de inversión, este pasó de los 245 millones de euros de 2019, a los 300 millones de euros en 2020, lo que supuso un incremento interanual del 20%. No hay que pasar por alto que el fintech es un verdadero generador de empleo. Así, esta industria está detrás de más 12.000 puestos de trabajo, disparando la demanda de formación en competencias digitales. En cuanto a los sectores que conforman el mapa fintech en España, la vertical más potente y que cuenta con más empresas es la de las wealthtech. No obstante, la que más creció en 2020 fue la de payments, concretamente, un 20%.

En lo que se refiere a los préstamos, es precisamente la vertical dedicada al lending la que siempre ha tenido más empresas fintech entre sus filas. A día de hoy, una de cada cinco fintech es de préstamos. En este sentido, el cambio de paradigma era inminente, dado que la banca necesitaba complementarse con el crowdlending con el fin de no verse sobrepasada por las peticiones de las pymes. Asimismo, los solicitantes de financiación requerían nuevas vías que les proporcionasen una respuesta rápida con el objetivo de poner en marcha u optimizar sus negocios lo antes posible. Esta confluencia de intereses ofrece un nuevo escenario de inversión al ahorrador, al que se le brinda la oportunidad de obtener ingresos pasivos gracias a la rentabilidad de los préstamos a empresas o particulares.

Según Asufin, el 32,63% de la población conoce las fintech, pero solo un 16,7% las usa habitualmente. Consultar movimientos bancarios (96,3%) y realizar pagos un transferencias (90,1%) son los usos más extendidos

Aunque la presencia de las fintech es cada vez más importante en España, lo cierto es que su permeabilidad en la sociedad todavía tiene que dar un paso adelante. El estudio sobre conocimiento, hábitos y uso de fintech en España, publicado por Asufin a finales de 2020 reveló que apenas el 32,63% de la población conoce las fintech y solo un 16,7% de los que manifiestan conocerlas declara que las usa habitualmente. Por otro lado, el 96,3% de los encuestados admitieron utilizar Internet para consultar movimientos bancarios y un 90,1% realiza pagos y transferencias. En este sentido, su uso queda constreñido a tareas sencillas, sin explotar todo lo que la tecnología puede hacer por él en el ámbito de las finanzas, desde gestionar ahorros e inversiones (28,1%) a contratar productos y servicios (26,1%), entre otras opciones. Este perfil conservador se extiende prácticamente a todos los grupos de edad, donde la brecha digital se hace patente. Los más jóvenes, entre 18 y 25 años, tienen un crecimiento mayor (38,5%), aunque los que más usan el fintech son los que tienen entre 26 y 35 años (25,1%). Un 19,9% de los mayores de 65 años conocen las fintech, pero solo el 2,6% las emplea.

Uno de los mejores vehículos para elevar el conocimiento de las fintech entre la población y servir de guía a las empresas es la existencia de una asociación que aúne los intereses de todas ellas: la Asociación Española de Fintech & Insurtech (AEFI), cuya misión es “colaborar, innovar e impulsar a España como un foco pionero de Fintech e Insurtech”, tal y como manifiestan en su web. CIVISLEND ya forma parte de ella. Con valores por bandera tan importantes como la transparencia, la colaboración, la comunicación y la investigación, esta organización es un referente esencial para todos aquellos que tienen su vista puesta en este sector, dado que promueve y participa en eventos centrados en este negocio y supone en sí misma un punto de encuentro excelente para todos los profesionales.