Málaga se encuentra en una fase decisiva de su evolución urbana. La ciudad continúa atrayendo a talento internacional, empresas tecnológicas, estudiantes, profesionales y nuevos residentes que buscan establecerse de manera estable. Esta dinámica ha intensificado la demanda de vivienda hasta niveles sin precedentes. El informe “Visión 2025: Málaga, cuestión de futuro”, elaborado por Savills, estima que la provincia podría necesitar acoger más de 151.000 nuevos hogares en la próxima década, mientras que la capacidad proyectada de construcción se sitúa en torno a 16.400 viviendas, siempre y cuando se logren agilizar los procesos urbanísticos y se movilice el capital necesario para ejecutar los desarrollos. La brecha entre necesidad y oferta es evidente, y la clave para cerrarla está en la capacidad de financiación.
Aquí es donde Civislend ha demostrado su papel como agente real de transformación. La plataforma ha financiado hasta la fecha 34.870.000 euros en proyectos residenciales en Málaga, impulsando el desarrollo de alrededor de 70 viviendas y unidades inmobiliarias en la provincia. No es una cifra abstracta: son proyectos concretos, situados en barrios y zonas donde la demanda es real y creciente. La actividad de Civislend es construcción, es suelo activado, es vivienda que existe y que incide directamente sobre la estructura urbana de la ciudad.
Civislend es una plataforma especializada en financiación participativa para el sector inmobiliario. Conecta a promotores que necesitan capital para desarrollar sus proyectos con inversores que buscan obtener una rentabilidad. Los inversores pueden participar desde 250 euros, eligiendo en qué proyectos invertir, con rentabilidades que se sitúan habitualmente entre el 10% y el 13% anual en una media de 15 meses.
La compañía opera desde 2017 y está regulada por la CNMV, actuando como intermediario en la concesión de préstamos a promotores. Su función no es sustituir al banco, sino complementar y agilizar la financiación, permitiendo que proyectos viables avancen sin quedar bloqueados por los requisitos del crédito tradicional.
Esta financiación ha permitido sacar adelante 21 proyectos en Málaga hasta la fecha, con una rentabilidad media del 10,67% anual y plazos de inversión en torno a los 16 meses, una fórmula que ha resultado especialmente eficaz para los inversores y para los promotores.
Miles de inversores han invertido en los proyectos. En total, se han realizado en torno a 15.000 inversiones en estas operaciones, de las cuales 4 proyectos ya han sido reembolsados por completo, mientras el resto continúa en curso, devolviendo capital e intereses.
El modelo funciona porque está diseñado para conectar dos necesidades reales: promotores con proyectos viables que no pueden esperar los ritmos de la financiación bancaria tradicional, e inversores que desean participar en economía tangible con retornos claros y plazos definidos.
La diferencia de Civislend no está solo en ofrecer financiación, sino en cómo la ofrece. La plataforma analiza cada proyecto desde una perspectiva financiera, técnica y jurídica, incorpora garantías estructuradas cuando el activo lo permite y acompaña al promotor durante todo el ciclo de vida del desarrollo. Este enfoque profesional, ágil y transparente es lo que permite que los proyectos avancen y que la rentabilidad para el inversor se materialice.
Málaga, además, no es una ciudad que crece solo en extensión, sino en modelo urbano. Los desarrollos de los diferentes distritos y zonas forman parte de un nuevo marco residencial de distintas tipologías. Pero ningún plan urbanístico, por ambicioso que sea, se ejecuta sin financiación. Aquí la financiación participativa se convierte en una herramienta de desarrollo urbano.
Civislend está permitiendo que la ciudad avance en el ritmo que la demanda exige, no en el que la financiación lenta impondría. Y la diferencia entre esas dos velocidades no es menor: en un mercado donde el precio del metro cuadrado ha crecido un 15% en cinco años y donde en zonas como Carretera de Cádiz o Málaga Este los valores superan los 6.400 €/m², acelerar la producción de vivienda no es solo una cuestión económica, sino social.
Málaga está construyendo su futuro ahora. La pregunta es quién participa en ese futuro. Con Civislend, miles de inversores ya lo están haciendo. No observan el desarrollo de la ciudad desde fuera: forman parte de él.