Las finanzas son un quebradero de cabeza para muchas personas. No haber aprendido a gestionar bien tu economía personal desde el primer momento que empezaste a ganar un sueldo hace que con el paso de los años te cueste llegar a fin de mes. El estar siempre preocupado por estirar lo que ganamos y llegar a todo lo inmediato, hace que perdamos perspectiva sobre nuestra vida y nos veamos incapaces de asumir compromisos a largo plazo, tales como formar una familia o comprar una casa. A veces nos desentendemos de las cuestiones monetarias por pereza, haciéndole un flaco favor a nuestro yo del futuro. La ausencia de planificación hace que pospongamos el ahorro y, por tanto, la entrada en el mundo de la inversión. Es hora de tomar cartas en el asunto y fomentar la inteligencia financiera. El crowdfunding inmobiliario puede ayudarte a conseguirlo.

¿Qué es la inteligencia financiera?

De forma resumida, se podría decir que la inteligencia financiera es el conjunto de conocimientos y habilidades que hacen que seamos capaces de encontrar soluciones a los problemas que nos plantea el dinero. Gracias a ella te mantendrás a salvo de situaciones límite que desembocan en el estrés financiero. Estar contra las cuerdas, en términos económicos, es un escenario del que se puede salir y del que uno se puede mantener alejado siempre y cuando ponga los medios. Para ser más inteligente en cuestiones monetarias hay que acabar con gastos que no representan realmente una necesidad, lo que implica un control y seguimiento de los mismos. Paralelamente, hay que buscar métodos para incrementar tus ingresos. Del mismo modo, hay que mantener a raya el endeudamiento, procurando que sea sano y razonable. Por otro lado, es esencial construir una estrategia de ahorro ajustada a tu perfil en la que la inversión haga acto de presencia, y cuanto antes mejor.

¿Por qué es importante la inteligencia financiera?

Cada día tomas decisiones sobre a dónde va tu dinero. A veces, incluso de forma poco consciente. Decides llenar el depósito de tu coche para ir a trabajar en vez de pararte a pensar cuánto ahorrarías si cogieras el transporte público. Decides también salir a comer fuera en vez de comprar comida en el supermercado y cocinarla en casa. Decides irte de vacaciones muy lejos pasando por alto otros destinos más cercanos e igual de interesantes. Decides seguir pagando un alquiler abultado en vez de buscar algo más económico y ahorrar para comprar tu propia casa el día de mañana. Cuando das un paso al frente y mejoras tu inteligencia financiera, tomas mejores decisiones, controlas el gasto y ahorras más. Con los años, ganas confianza y construyes una mentalidad inversora que te permite cumplir con tus objetivos. Cuanto mejor te administres, más te alejarás de la ceguera financiera y más te acercarás a la libertad financiera. La buena noticia es que la inteligencia financiera se puede adquirir y perfeccionar.

Tres claves para desarrollar la inteligencia financiera

1. Dedícale tiempo a la educación financiera

Deja atrás falsos mitos como la economía es difícil y deja de repetirte lo de «esto no es para mí». Asume cuanto antes que la relación que vas a mantener con el dinero es para toda la vida y aprende cuanto antes a entenderlo, mimarlo y multiplicarlo. Lo primero es hacer una foto de tu situación financiera actual, saber por dónde se va lo que cada mes te cuesta tanto ganar y qué puedes hacer para recortar gastos. Es un ejercicio duro al principio, pero a medida que seas tú quien controle el dinero y no al revés, la satisfacción irá creciendo. Internet es una fuente inagotable de conocimiento para todos los niveles. Una vez superado el aprendizaje básico, sigue descubriendo nuevas técnicas para tener tus finanzas en orden.

2. Dale la importancia que se merece al ahorro

Se acabó lo de llegar con los bolsillos vacíos a final de mes. La inteligencia financiera te impulsará a diseñar un presupuesto, y si lo sigues sin desviarte y haciendo caso omiso a las tentaciones, pronto verás que acumulas ahorro. Sé fiel a este hábito y no caigas en la trampa de malgastarlo en caprichos o, lo que es peor, de endeudarte de nuevo y volver a derrochar por encima de tus posibilidades. Ten en mente que, con el paso de los meses, lo que antes era un sacrificio, ahora será algo cotidiano. De nuevo, los métodos para ahorrar son casi infinitos, desde el 50/30/20 al preahorro. Solo tienes que escoger el que más te encaje y construir tu fondo de emergencia.

3. Genera más ingresos haciendo trabajar a tu dinero

Para mantener un estilo de vida concreto, muchas personas compatibilizan dos empleos o más que les dejan exhaustos. A lo mejor de lo que se trata es de ajustar tus necesidades sin restar felicidad a tu vida. Y tampoco se trata de matarse a trabajar, porque eso no es calidad de vida, sino de buscar fórmulas que hagan que percibas ingresos pasivos sin tenerte más horas de las razonables trabajando. A medida que tu inteligencia financiera se expanda, te darás cuenta del gran potencial que tiene tu dinero y de lo poco saludable que resulta para tu poder adquisitivo presente y futuro mantener tus fondos parados. Existen productos de inversión adecuados para todo el mundo, incluso para los más conservadores.

El crowdfunding inmobiliario y la inteligencia financiera

Cuando comiences a investigar sobre las diferentes alternativas que pone en tu mano la inversión, será mejor que tomes aire, porque son múltiples y muy variadas. Hay opciones para todos los gustos: de renta fija o variable, con mayor o menor riesgo, etc. Antes de apostar por cualquier de ellas debes tener definido tu perfil de inversor, tu horizonte temporal y tus objetivos, y sin descuidar la recomendación de diversificar. Dentro de este extenso catálogo está el crowdfunding inmobiliario. Invertir en inmuebles o en préstamos y obtener rendimientos recurrentes es el premio a tu empeño por instaurar la inteligencia financiera en tu vida. La sencillez y la transparencia de plataformas de financiación participativa como CIVISLEND te ayudarán a capitalizar tu ahorro, impidiendo que siga perdiendo valor.